"Mi opinión sobre la amnistía. (Expresada ayer en el Comité Federal del PSOE).
De entrada deberíamos preguntarnos de qué amnistía hablamos. Me refiero a sus contenidos de carácter más político. Y me centro en ellos por entender que la ley recogerá la fundamentación jurídica que le dé cobertura constitucional.
1. Mi opinion contempla solo consideraciones personales porque desconozco los términos de la negociación y la redacción que plantea Pedro Sánchez. Pero las condiciones que propongo al Comité Federal tienen el objetivo de aportar más credibilidad a la necesidad de una amnistía. Sobre todo cuando los socialistas la hemos negado, lo mismo que su constitucionalidad, hasta hace poco.
La amnistía no es tanto una necesidad para lograr la convivencia en Cataluña que ya está encaminada tras la aprobación de los indultos y otras medidas de reforma legislativa (sedición y malversación) que han permitido recuperar la normalidad. La amnistía se retoma por pura necesidad de hacer viable la investidura. Es importante explicar a la ciudadanía la razón de nuestro giro en este delicado tema. La verdad es que la amnistía es el precio a pagar para lograr investir a un Gobierno que siga promoviendo políticas de progreso y cierre el paso a la involución que proponen PP y VOX.
Pero tenemos que preguntarnos, en el caso de que no acertemos con la redacción de la ley, qué precio y durante cuanto tiempo pasaría factura al PSOE.
¿Cómo afectaría una amnistía, sin las debidas condiciones democráticas, a la convivencia de la sociedad en el resto de España ante tanta crispación y polarización y ante la ausencia de responsabilidad y consenso en la vida política? ¿Qué consecuencias traerá a la ya difícil convivencia en el Parlamento y a la gobernabilidad de España? ¿Qué huella podría dejar en el PSOE una amnistía mal construida y una gobernabilidad endiablada sometida al desgaste que alimenten algunas de las propias fuerzas que reclaman ahora la amnistía?
2. Una amnistía relacionada con el procés independentista adquiere pleno sentido político si se explica que el objetivo buscado es la reconciliación y la concordia. Pero una medida tan discutible y sometida a lecturas partidistas exige gestos y cesiones claras por todas las partes. ¿Qué ceden ellos? ¿A qué se comprometen a cambio?
La amnistía NO puede entenderse por la ciudadanía como el perdón de un Estado democrático a quienes han declarado hasta la saciedad que lo volverán a hacer, que volverían a promover un proceso unilateral saltándose la Constitución. Dependemos hoy de Puigdemont que como político no se ha ganado el respeto porque desprecia a España y la democracia.
3. Llegado el supuesto de un acuerdo sobre la amnistia con Junts, ERC y otros grupos, debería reflejar que todas las partes asumen un coste político. Por ello, defiendo que la Ley recoja en su Preámbulo que aquel proceso independentista fue contrario al Estado de Derecho por lo que a fin de garantizar su no repetición se impone el desistimiento y la renuncia a la utilización de la vía unilateral, en favor del diálogo, el mutuo acuerdo y siempre en el marco de la Constitución.
Me parece un error estratégico que el PSOE no haya señalado, públicamente y desde el inicio de las conversaciones, aquellas garantías que entendemos básicas en un sistema democrático para apoyar otra amnistía. Esto hubiera permitido, en caso de fracasar la negociación de la investidura de Pedro Sánchez por este asunto, acudir con mayor coherencia y más fuerza al Plan B que responde a una repetición electoral en enero.
4. Pero tras nuestros silencios -nos dicen que por discreción-, en contraste con los actos y declaraciones de los demás, en especial del PP y Puigdemont, acudiríamos forzados a unas nuevas elecciones y con pérdida de credibilidad tras lo acontecido en estos meses.
Considero que no ha existido un Plan B tras nuestra derrota electoral el 23J. Un Plan B significaba una estrategia del PSOE pensada para preparar la hipótesis de una repetición de las elecciones. Se renunció a esa opción y nos hemos volcado en el Plan A para sacar la investidura. Aún a riesgo de tener que pagar una peligrosa factura electoral por una estrategia errónea y por la ausencia de política de comunicación que explicara las razones de nuestro giro radical sobre la amnistía. Si finalmente se celebrarán nuevas elecciones acudiríamos en una posición de gran debilidad.
5. Hablemos de la Consulta exprés a la militancia que propone Pedro Sánchez. El PSOE dio un paso importante en el 39 Congreso fortaleciendo los principios de participación, deliberación, información, transparencia y consulta. Avanzó entonces la DEMOCRACIA INTERNA. Luego se produjo un retroceso en el 40 Congreso. Sobre esas bases deberían realizarse las Consultas.
La Consulta a la militancia socialista no debe quedarse en la ratificación del acuerdo de programa con SUMAR, cuya aplicación estaría muy condicionada por los partidos que apoyen la investidura. Ni en una Consulta ampliada a la aceptación de negociar el apoyo, en abstracto, de otros grupos. En esta coyuntura, la Consulta -sobre un programa incompleto y acuerdos desconocidos- se convierte en un trámite exprés de mera adhesión y sin debate de fondo.
6. Por ello, propongo a la CEF, en cumplimiento del art 50 de los Estatutos, 347 y 348 del Reglamento Federal, que apruebe la celebración de otra CONSULTA a la militancia sobre la Ley de Amnistía que se acuerde -en concreto- con los independentistas, por ser la amnistia una decisión de extraordinaria trascendencia política. Esta Consulta, previa información y debate, es una obligación de nuestra democracia interna.
7. Propongo también, en base al art 48 de los Estatutos, la convocatoria, en los próximos seis meses, de una CONFERENCIA extraordinaria centrada en la actualización y nueva configuración del Estado Autonómico, ante los problemas de cohesión, financiación, ejercicio de competencias, coordinación, etc, que arrastra. Una Conferencia sobre cuatro ejes de debate: - autogobierno en el siglo XXI, - gobernanza de corte federal , - eficiencia de la gestión descentralizada y - cohesión y solidaridad interterritorial.
San Sebastián 29 de octubre de 2023."